Arte gótico… no es tan obscuro como pensamos

El arte gótico tiene nuevas concepciones y objetivos diferentes a las del arte románico que le antecede, pero tomemos en cuenta que cada movimiento nace del anterior, así que, a pesar de las diferencias, se conservarán semejanzas.
El arte románico surgió en el campo. No tenía como finalidad llamar a una gran cantidad de gente. En los templos de este estilo, habitaban únicamente los monjes, que se dedicaban a traducir textos y que en ellos hacían hermosas y coloridas imágenes en cada una de las letras capitales (lo que se le llama Manuscritos iluminados).
Mientras tanto, el gótico se establece en la urbe, y busca atraer a un mayor número de gente. Esto provoca que se comience a decorar el exterior, y la fachada, antes poco tomada en cuenta, se vuelve parte clave de la construcción.
El arte románico no buscaba la luz. Era un lugar apartado dedicado totalmente a la espiritualidad. Esto cambio en el gótico, la disposición de las columnas (ahora entrecruzadas) permitió la colocación de grandes vitrales por donde podía entrar luz.
La cantidad de ornamentos aumentó, tanto en el interior, como en el exterior. La mayoría de nosotros a oído acerca de las gárgolas, resulta que estas tenían dos fines, ser el desagüe y ahuyentar demonios, ya que se creía que los demonios se asustaban al verse a si mismos.
Normalmente relacionamos al gótico como algo oscuro y hasta demoniaco. Esto es porque en su surgimiento no era bien aceptada y se le dio ese nombre debido a los godos, quienes eran fuertes, jóvenes, y despiadados. Pero, al igual que muchas palabras y movimientos, se quedan así por costumbre sin importar de donde venga su significado.
Debido a que las construcciones románicas las realizaban únicamente especialistas o personas de la orden religiosa, no resultaban un gran orgullo nacional. Esto cambio en el gótico, ya que la construcción se realizaba por toda la urbe, así, las construcciones góticas resultaban ser un orgullo para cada ciudad. Todas buscaban tener algo en especial; ser las más grande, ser la más alta, etc.
En estos dos estilos podemos ver un cambio importante. En los templos románicos se tenía un fin totalmente espiritual. Esto lo permitían elementos en la construcción como la poca entrada de luz, la falta de ornamentos (ya que estos pueden distraer), entre otros.
En el estilo gótico se ve que tiene la finalidad de congregar y atraer un gran número de gente. Es probable que este estilo represente una aceptación a que necesitamos del mundo físico, y no únicamente del espiritual.

Dios en las Iglesias

En el año 311 d.C., una vez que el Cristianismo comenzaba a establecerse como religión de estado, se construyeron templos que satisfacían las necesidades propias de los rituales que los fieles debían llevar a cabo. La importancia de estos templos, que más adelante fueron conocidos como iglesias, reside en su decoración y organización que cumplía con funciones fundamentales y específicas del cristianismo.

Debido a que la mayor parte de los feligreses eran analfabetas, las cosas debían ser explicadas de manera fácil para que todos entendieran sin dificultad; por medio de imágenes de la vida de Jesucristo y fragmentos de la Biblia, lo que les evitaba la necesidad de leer el Evangelio. Para que todos los fieles pudieran entender las imágenes, éstas debían representarse lo más claras y sencillas posibles, también con el propósito de que no se perdiera la atención de los mismos. El diseño de los cuerpos en las pinturas de las iglesias podía parecer primitivo debido a la mezcla de las ideas egipcias sobre la importancia de la claridad, y las evoluciones de las formas, según los griegos.

Los espacios en las basílicas respondían a la adoración de un dios que los creyentes reconocían a través de las imágenes colocadas en la iglesia. La zona más importante era el ábside, donde generalmente estaba la imagen de lo que se llama Pantocrator (imagen del Cristo barbado, representando a la Santísima Trinidad con sus dedos). El transepto era donde estaba la cúpula en lo alto. La gente se congregaba de pie en las naves laterales, dejando un espacio vacío en la nave principal; el nártex era la conexión de aquellos que estaban adentro con una zona exterior que aún pertenecía al templo, llamado atrio. Lo que sería la puerta asemejaba un arco triunfal, siempre buscando una magnificencia que llamara la atención de los paganos e infundiera la fe en los creyentes.

Hubo aquellos que veían como una ofensa el hecho de representar a la divinidad por medio de íconos e imágenes como las que se utilizaban en los mosaicos dentro de las iglesias, conocidos como iconoclastas; pero también hubieron quienes defendían el uso de éstas imágenes y lo fundamentaban con la utilidad didáctica que tenían. En el año 750 d.C. se dio uno de los momentos más críticos de la querella entre los iconoclastas y los que defendían las imágenes de Cristo, la Virgen, los Apóstoles y otros Santos.

La importancia del arte en las iglesias fue desarrollándose cada vez más, de manera que se buscó plasmar las ideas de la religión por medio de esculturas, construcciones o imágenes. La arquitectura de las iglesias ha evolucionado con el tiempo, y hoy en día existen distintos tipos de construcciones que le dan a estos templos una esencia personal de la casa de Dios. Las imágenes religiosas han influido bastante en la mayoría de los creyentes, de tal manera que estos colocan altares, pinturas, esculturas, muñecos, etc, dentro de sus casas o incluso en los panteones; dejando a un lado a los iconoclastas. Actualmente el cristianismo es la religión con un gran número de seguidores que asisten a misa cada vez que es necesario; acentuando la importancia de las iglesias desde hace ya más de 1500 años.

Todos los caminos llevan a Roma

La cultura romana se puede considerar como una cultura “plagiada” puesto que a pesar de que lograr desarrollar cosas impresionantes como el Coliseo y la arquitectura de medio punto, los caminos su arte y no solo escultórico era una copia de los griegos, en la literatura los griegos tuvieron a Homero el cual escribió uno de los poemas más increíbles que hay en la historia de la literatura universal puesto que tiene métrica y todos los elementos necesarios, en Roma tuvieron a Virgilio el cual fue el encargado de hacer la versión romana de la Ilíada/la Odisea, conocidas como La Eneida de Virgilio, que fue una petición del emperador Augusto, el cual admitió que imitar una obra como la de Homero era imposible así que al final dejo de imitar su obra y la termino a su gusto.
Entre otras cosas los romanos fueron los que sus conquistas impusieron el alfabeto (que no es el mismo que el abecedario) en los pueblos sometidos, también construyeron los caminos de ahi el refran que dice todos los caminos llevan a Roma, parte de sus prácticas después fueron tomadas por el Cristianismo como el bautismo o la crucifixión.
Posiblemente la cultura romana ha trascendido más por sus conquistas y por difundir de alguna manera el arte griego a través del mundo, pues su cultura era más bien política y funcional que realmente buscar algo estético puesto que más bien era como un adorno más que tener una función de ser una obra de arte, también esta como ejemplo la columna de Trajano la cual relata su historia, o la Lupa Capitolina la cual es sobre la conocida de historia de Rómulo y Remo.

Evolución del Arte Griego

El Arte griego se desprende de la rigidez y la falta de volumen como literalmente fue que sucedió, en la historia de su desarrollo. En el arte egipcio se muestra un avance prácticamente nulo, con una forma de ser totalmente uniforme. A excepción del perdió gobernado por Akenatón, en miles de años no hubo un desenvolvimiento o concepción del arte distinta a la que hubo desde sus inicios; sin embargo los griegos asimilaron los cánones egipcios así como las técnicas, especialmente de la escultura y poco a poco se dio un cambio que sería el primer gran giro en la historia del Arte.
A diferencia de Egipto en Grecia se dio una gran evolución en el arte, debido a que éste dependía del mismo artista y no estaba encuadrado en un estilo y función altamente religiosa y elitista como en la cultura egipcia. Cada artista decidió, experimentó, incluso se apropio y le dio un estilo distinto a sus esculturas. Si bien el artista no era valorado como alguien de rasgos geniales o admirables como lo eran los filósofos, fue después de la reconstrucción de la Acrópolis de Atenas bajo el mandato de Pericles, que se desentierran los primeros nombres importantes como Ictino quien tenia pasos más ligados a la arquitectura y Fidias, autor de las más grandes esculturas que devinieron en aquel momento situado en el 480 a.C.; a escasos 50 años después del gran descubrimiento en el Arte Griego, “el escorzo”, que impactaría años más tarde rotundamente la historia del arte en todo el mundo (especialmente en el renacimiento cuando todos estos principios fueron retomados).

Los artistas son quienes se ubicaron como maestros de sus investigaciones en anatomía, perspectiva, volumen y demás fundamentos que dieron como resultado obras de extrema majestuosidad y belleza. Empezando por las esculturas de Fidias aun ligeramente rígidas pero totalmente imponentes como la “Atenas del Partenón”, siguiendo por esculturas que lograron trascender a través de las replicas Romanas como el “Discóbolo” donde ya se entrañaba en una anomia con bases de estética y proporción que lograban la belleza absoluta retomando lo mejor de varios modelos que posaban para la misma obra y finalmente piezas verdaderamente maestras como el “Laoconte”.

El Arte tomo una concepción altamente similar a la que hoy día tenemos, si bien aun no era posible un desenvolvimiento tan intenso, se dieron formas de verlo muy avanzadas para su época, el hecho de que dejo de ser representativo o utilitario para adornar templos y grandes construcciones, en cambio fue incluso comprado para hacer representaciones de gente que tenia poder adquisitivo y deseaba poseerlo a modo lo que podemos llamar las primeras comercializaciones de Arte, así mismo se dieron creaciones con temas distintos a los religiosos o relevantes aparentemente. El Arte griego avanzo con tal fuerza que los cambios generados en aquel entonces, tarde o temprano hicieron eco hasta nuestros días.